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“¿Cómo podemos tener corazones rebosantes de alegría?”.

Mientras cantábamos junto a los niños de la clase bíblica, mi amiga y hermana en Cristo hizo esta pregunta a los pequeños para que meditaran en lo que estaban cantando. La respuesta se encontraba en los mismos versos de la alabanza: “Rebosando está mi copa desde que Él me salvó; grande gozo tengo yo”. El gozo de nuestra salvación se refleja en corazones agradecidos, o por lo menos debería. ¿Será que realmente manifestamos gratitud de corazón por lo que Dios ha hecho con nosotros? ¿O nuestra “oración de gratitud” parece más bien una lista de supermercado que completar rápidamente cada mañana?

En el libro Sublime gratitud, Mary K. Mohler — esposa del presidente del Southern Baptist Theological Seminary— nos recuerda que nuestra principal fuente de gratitud, alabanza, y gozo es la salvación que Cristo ofrece. A través de ocho capítulos de lectura sencilla y reflexiva, la autora propone que consideremos nuestra actitud actual de agradecimiento: ¿Cómo luce realmente nuestra vida cristiana? ¿Cuáles son nuestros obstáculos más grandes para tener un corazón agradecido? Para ayudarnos a meditar al finalizar cada capítulo, Mohler nos guía en oración y haciéndonos algunas preguntas de reflexión.

Sublime gratitud

Sublime gratitud

Portavoz. 144 pp.

Sublime gratitud es un libro que te permite examinar tu vida y encaminarla hacia la voluntad de Dios. Mientras avanzaba a través de las páginas, consideraba más y más cómo mis actitudes diarias muchas veces no reflejan un corazón agradecido y que ello no daba buen testimonio de mi Salvador. Afortunadamente, Mary no nos deja ahí. Luego de ser confrontada con mi pecado, fui exhortada para ver cómo puedo cambiar en el poder del Espíritu y para la gloria de Dios.

Portavoz. 144 pp.

Tipos de gratitud

En cada capítulo (todos, por cierto, te hacen sentir como si Mary te estuviese exhortando en persona) se distinguen dos tipos de gratitud, propuestas originalmente por el teólogo norteamericano Jonathan Edwards (1730-1733). La primera de ellas —la gratitud natural—, consiste en agradecer a Dios por las dádivas y bendiciones que nos permite gozar día a día, incluso aquellas por las quizá nunca se nos habría ocurrido agradecer, como las dificultades (p. 79). Un segundo tipo de gratitud es la que se ha llamado “gratitud espiritual”, que nos lleva a pensar en el carácter de Dios —en cómo y quién es Él— y agradecer por ello en adoración.

​Ser intencionalmente agradecidos de ambas maneras, incluso en las dificultades, tiene un propósito: glorificar a Dios. Nuestra gratitud puede ser un poderoso testimonio; Mary escribe que debemos “rebosar agradecimiento al Señor y dejar que se derrame en el modo en que tratamos a los demás” (p. 122).

Comienza hoy

Sin duda, Sublime gratitud es un libro que te permite examinar tu vida y encaminarla hacia la voluntad de Dios. Mientras avanzaba a través de las páginas, consideraba más y más cómo mis actitudes diarias muchas veces no reflejan un corazón agradecido y que ello no daba buen testimonio de mi Salvador. Afortunadamente, Mary no nos deja ahí. Luego de ser confrontada con mi pecado, fui exhortada para ver cómo puedo cambiar en el poder del Espíritu y para la gloria de Dios.

No importa quiénes seamos o de dónde vengamos, aún estamos a tiempo de llenar nuestras mentes y corazones de aquello que nos lleva a glorificar al Señor en gratitud. Te invito a descubrir cuánto gozo puede alcanzar tu corazón al mostrar agradecimiento hacia nuestro Salvador y, si es necesario, eliminar de raíz las situaciones o posturas que nos impiden ser agradecidos. Sublime gratitud es un excelente recurso para empezar a dar pasos en la dirección correcta.

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