¡Únete a nosotros en la misión de servir a la Iglesia hispana! Haz una donación hoy.

×

Este poema se lee como una confesión a Dios por haber temido más a otros seres humanos que a Dios mismo.


El temor al hombre me ha robado
mil poemas, mil canciones,
mil amigos y emociones,
que en mentiras no he encontrado.

Si no enmiendo me amarán
y adeptos ganaré.
Una silla llenaré,
mas su alma perderán.

Vestir pobre o distinguido
depende de la ocasión.
Si es con pobre mal vestido,
elegante en la mansión.

Confrontar en estos tiempos
es de locos anticuados;
es mejor decir te amo
y mantenerlos encantados.

Las riquezas del camino
son zarcillos y candados;
son hermosos y dorados,
perdición del peregrino.

Que en mí haya temor,
cuando al Padre me presento.
Seré lleno de valor,
esperanza y aliento.

Para el hombre hay amor,
gracia y respeto;
mas temor solo al Señor,
cada día mi sustento.

Recibe cada día los artículos, podcasts, y vídeos más recientes.
CARGAR MÁS
Cargando