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Las redes sociales son de gran bendición para muchos cristianos. Desde hace muchos años hemos aprovechado este medio para expandir el Reino de Dios en la tierra, como sucedió con la revolución industrial y el lanzamiento de la imprenta, a través de la cual se logró publicar masivamente la Palabra de Dios.

De la misma manera, las tecnologías que usamos hoy, como el Internet, han sido la plataforma perfecta para que muchos cristianos compartan sus ideas, libros, artículos, y todo tipo de información que enseña, motiva, y equipa en el evangelio.

Sin embargo, no todo el contenido que encontramos en las redes es edificante.

El enemigo también ha tomado ventaja de la tecnología para llevar a cabo sus planes. GuardChild, un sitio web que habla sobre la seguridad digital, señala que alrededor del 70 % de los chicos entre 8-18 años ha tenido acceso a pornografía en Internet. Y esta es una entre cientos de estadísticas que hablan sobre los peligros en la red.

Por eso es importante que hablemos sobre cómo el evangelio y la cosmovisión bíblica impacta nuestra vida, ¡y eso incluye también nuestro trabajo como community managers!

Durante casi 12 años trabajando en la industria del mercadeo digital, he podido ver cómo la Palabra de Dios ha moldeado por su gracia la forma en que desarrollo cada proyecto. Aquí te comparto algunos consejos que te ayudarán a redimir el uso de las redes sociales en tu trabajo:

1. De la hiperconectividad a la desconexión

Aunque ser community manager te exige estar conectado una buena parte del día, es importante que aprendas a desconectarte. Trabajar a diario en redes sociales es un reto para desarrollar las disciplinas espirituales, y en especial la quietud a solas con Dios.

Un gran porcentaje de las personas que desean dedicarse al marketing digital, lo hacen porque creen que es fácil y divertido. Sin embargo, existen razones importantes por las que es necesario desconectarse. Para empezar, está la cantidad excesiva de tiempo que pasamos en Internet y la exposición constante a contenidos que se comparten en las redes sociales.

Trabajar a diario en las redes sociales es un reto para desarrollar las disciplinas espirituales, y en especial la quietud a solas con Dios.

Por ejemplo, en abril de este año, Instagram reveló en su blog que en la plataforma se comparten 95 millones de fotos diariamente. Esta estadística no incluye los videos, stories, carruseles, y videos de IGTV. Aunque sería complejo ofrecer una estadística, sí podríamos afirmar que la mayor parte de este contenido publicado no es acorde a los principios bíblicos, y por ende, no representa una influencia positiva para la vida de sus consumidores.

En este sentido, como community managers tenemos una posición privilegiada al influenciar o decidir sobre el contenido que publicamos, de modo que podamos ofrecerle al mundo más contenido valioso y edificante a través de las marcas y campañas que manejamos.

Además, debemos entender que la conectividad ocupa el tiempo que debemos dedicarle al estudio de la Palabra de Dios y a la oración.

Como estar conectados constantemente a Internet es parte de nuestro trabajo, lo primero que acostumbramos hacer en las mañanas es tomar el teléfono para saber lo que ha sucedido con cada marca mientras dormimos, o si un cliente nos envió un correo. Pero ¡ese es el mayor error que podemos cometer!

Te puedo asegurar que los días en que he caído en esa trampa son mucho más pesados para mí y tiendo a perder mucho más tiempo en el celular literalmente haciendo nada. Por esto es necesario establecer límites, ya que si nos descuidamos podemos incluso dejar de prestar atención en un servicio dominical o asistir a la iglesia con la “excusa” de que tenemos que trabajar.

Si bien es cierto que nuestro trabajo depende de la cantidad de likes, de la constante actividad, de mantenerse conectado, y de publicar a diario, debemos cuidarnos de caer en la falsa creencia de que ahí también radica nuestro valor como personas y profesionales.

Ponerle límites y un horario al uso del celular, establecer reglas claras de las horas de respuestas con los clientes, usar un calendario para respetar los compromisos con la iglesia, y apartar tiempo para compartir con la familia y amigos, es vital para mantener un equilibrio sano entre este trabajo que nos mantiene hiperconectados, y nuestra vida diaria y espiritual.

2. Del engaño a la verdad

Todo community o social media manager ha lidiado con la mentira y se ha cuestionado: ¿este producto que estoy promocionando realmente hace todo lo que yo estoy publicando, o lo que me están pidiendo que publique?

Cuando llegue ese momento, antes de tomar una decisión, lo primero que debes hacer es recordar Colosenses 3:23-24: “Todo lo que hagan, háganlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres, sabiendo que del Señor recibirán la recompensa de la herencia. Es a Cristo el Señor a quien sirven”.

Recordar que todo lo que haces debe glorificar al Señor te ayudará a mantenerte veraz en tu trabajo.

Recordar que todo lo que haces debe glorificar al Señor te ayudará a mantenerte veraz, no solo con las publicaciones y campañas publicitarias que haces para otras empresas, sino también para reflejar a tus clientes los valores y principios en los que crees.

Este conflicto entre el bien y el mal, o el engaño y la verdad, se libra cada día en nuestra mente y corazón. Se evidencia en todo lugar y en todo lo que hacemos. Para nosotros, no puede haber una jerarquía entre lo sagrado y lo secular, entre lo santo y lo profano. En este mundo digital, en el que las personas y marcas dedican sus perfiles a mostrar una vida o status que muchas veces es falso, es necesario que seamos una influencia positiva, marcar la diferencia al producir o distribuir contenidos de alta calidad que mejoran la vida de quienes lo reciben. 

Es difícil lidiar con situaciones en las que un cliente te exige publicar información falsa o poco confiable, pero hay algunos pasos que te recomiendo para manejar la situación bíblicamente y no ceder ante la presión:

  1. Oración: Santiago 1:5 nos dice que “si a alguno de ustedes le falta sabiduría, que se la pida a Dios, quien da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada”. Así que nuestra primera acción debe ser ir al Señor en oración y pedirle la sabiduría que necesitamos para lidiar y responder de la manera correcta.
  2. Obedece: La verdad es la verdad, y debes apegarte a ella. Si la Biblia es clara sobre el tema, debes obedecer al Señor por encima de todas las cosas. A pesar de que la Biblia dice que debemos respetar y obedecer a nuestras autoridades terrenales (Ro. 13), esto también tiene un límite, pues siempre será desobediencia a Dios la obediencia a las autoridades que van en contra de lo que Él establece.
  3. Que tus palabras sean dulces y con gracia (Col. 4:6): Es importante defender tus valores y convicciones, pero también es importante la mansedumbre y humildad con la que hablamos. Estas virtudes glorifican el nombre de Dios y dan testimonio fidedigno de nuestra fe.
  4. Descansa en Dios: Estoy consciente de que el mayor miedo de hacer esto es perder al cliente, pero te puedo asegurar que si obedeces al Señor, y buscas primeramente su Reino, todas las cosas que necesitas te serán añadidas (Mt. 6:33). Yo me he visto en la posición de rechazar trabajos grandes porque van en contra de mi fe, pero Dios ha provisto todo lo que necesito a nivel personal como también para mi empresa.

Sí, mantenerte firme en la verdad puede significar que crecerás profesional más lento que los demás y que te tome más tiempo ver resultados terrenales. Pero te aseguro estarás ganando tesoros en el cielo. Esto nos lleva al siguiente punto.

3. Del éxito a la integridad

En la búsqueda del éxito nos veremos tentados a aceptar trabajos que son poco o nada éticos, y que están en contra del evangelio. Creo que todos los que trabajamos en redes sociales hemos estado en esta posición. Por eso debemos pasar un filtro a los clientes potenciales que nos llegan, y ese filtro debe estar basado en la Palabra de Dios.

Trabajar en redes sociales no es algo para tomar a la ligera. Hay mucho que como cristianos debemos reflexionar al respecto.

La Biblia es clara en cuanto a las cosas que no agradan a Dios, así que algunas preguntas que debemos hacernos para decidir de una mejor manera son:

  • ¿Puedo glorificar con este trabajo al Señor?
  • ¿El contenido que voy a publicar violenta algún mandamiento?
  • ¿Con estas publicaciones o campañas estoy promoviendo una vida lejos de Dios?
  • ¿Puedo transformar positivamente con mi trabajo el mensaje que se ha estado comunicando en esta marca?
  • ¿Afecta mi testimonio el revelar que trabajo para X marca?

Estas preguntas te brindarán una perspectiva diferente y te ayudarán a tomar las decisiones correctas al momento de aceptar o rechazar proyectos. Pero personalmente, luego de hacerme esas preguntas, lo que inmediatamente hago es buscar consejo. 

La Biblia dice en Proverbios 11:14 que en la multitud de consejos está la sabiduría. Es necesario buscar consejo, siempre y cuando sea con personas maduras en la fe que puedan brindarnos puntos de vistas bíblicos. Preguntar a mis pastores y a mi mentora ha sido clave para mantener la integridad en mi profesión, y todavía es de mucha ayuda para mí.

Como puedes ver, trabajar en redes sociales no es algo para tomar a la ligera. Hay mucho que como cristianos debemos reflexionar al respecto. Oremos que Dios nos ayude a poner en el lugar correcto cada área de nuestras vidas, aún el uso y el valor que le damos a las redes sociales en nuestro trabajo.


Imagen: Unsplash.
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