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¿Cómo funciona la experiencia humana? Me he hecho esta pregunta con frecuencia. Recuerdo pensar: “Qué bueno sería dedicarse a precisar estas cosas y escribir sobre ellas… sería útil comprenderlas para tratar los problemas de los que nos rodean”. Pero pronto volvía a sumergirme en mis tareas dejando de lado estos asuntos.

Para mi agradable sorpresa, al sumergirme en estas páginas noté que el doctor Pierre presenta un esquema que captura esta dinámica con asombrosa claridad y sencillez.

La dinámica del corazón en la vida cotidiana emplea una sólida cosmovisión bíblica para explorar las tres dimensiones del corazón (cognición, emoción, y voluntad), que se expresan en un contexto vivencial de cuatro capas (circunstancias, relaciones con otros, relación con el yo, y relación con Dios), y brinda una guía práctica para consejería que aborda cada dimensión del corazón en cada capa de su contexto vivencial. Si tuviera que describirlo en dos palabras diría: ¡sencillamente extraordinario!

La dinámica del corazón en la vida cotidiana

La dinámica del corazón en la vida cotidiana

Editorial Bautista Independiente. 227 pp.

La dinámica del corazón en la vida cotidiana es un tratamiento académicamente competente, profundo, sensible, pastoral, teológicamente sólido, y agradable de leer, sobre la causa y dinámica de la expresión humana ante las circunstancias y relaciones en la tierra.

Oro que todo creyente sea iluminado por el Espíritu de Dios para comprender las nociones básicas presentadas en este libro, siendo equipado para ayudar a otros a vivir el propósito para el que fue creado: amar a Dios con todo su ser y amar al prójimo como a sí mismo. Todo pastor, consejero, padre, amigo, creyente, psicólogo, sociólogo, psiquiatra, y toda persona abocada a orientar algún aspecto de la vivencia humana se beneficiará grandemente de leer esta obra.

Editorial Bautista Independiente. 227 pp.

El doctor Pierre procura impulsar la eficacia de consejeros y creyentes para la edificación de la iglesia (y aun para la orientación del incrédulo), ayudándoles a comprender cómo funciona la fuente de toda expresión humana: el corazón dinámico. El autor explica que el corazón es una entidad creada por Dios para responder ante Él y su creación de maneras maravillosas y multifacéticas. Pensamientos, emociones, y compromisos emanan del corazón ante las circunstancias y relaciones siendo influidos por ellas e influenciándolas a su vez.

“Aunque las Escrituras se refieren al corazón como un elemento unificado, lo describen de forma tridimensional… el corazón humano responde cognitivamente, a través de procesos racionales basados en conocimientos y creencias. El corazón también responde desde el punto de vista afectivo, a través de un esquema de deseos y emociones. Responde volitivamente a través de una serie de decisiones que reflejan los compromisos intencionados de corazón. Los pensamientos, los sentimientos y las decisiones son respuestas complejas y dinámicas del corazón” (p. 15).

Pierre ayuda a los consejeros a comprender la naturaleza multidimensional de la experiencia humana, y los exhorta a considerar esta complejidad a la hora de analizar y tratar la vivencia del aconsejado. Este libro nos brinda una visión sólida y bíblica de la expresión humana, equipándonos para comprender los motivos de las acciones, pensamientos, deseos y compromisos en su contexto, orientándonos hacia un curso de acción posible para cada caso.

“En la consejería y en otras formas de ministerio personal, la estrategia trazada para el cuidado debe hurgar en la complejidad del corazón en lugar de simplemente rozar la superficie del problema en cuestión… La consejería debería concentrarse en abordar todas las funciones del corazón en su totalidad: los pensamientos, los sentimientos, las decisiones… La meta del consejero debe ser trabajar hacia la unificación de estas funciones para que el cambio se efectúe a nivel de todo el corazón y no de forma compartimentada” (p. 25).

El libro se divide en tres secciones. La primera explora el aspecto tridimensional de la experiencia humana (cognición, emoción, voluntad), y su vivencia a la luz del pecado, la redención por medio de la fe, y la interacción contextual. La segunda sección analiza las cuatro esferas de interacción del corazón activo (circunstancias, relaciones con otros, relación con el yo, y relación con Dios). La última sección brinda una guía práctica para comprender y tratar las vivencias de los aconsejados a la luz de la complejidad del corazón humano y sus capas de interacción.

Posiblemente el aspecto más destacable de esta obra sea la profundidad y fidelidad bíblica de los conceptos abordados. Todo el material está enmarcado en una cosmovisión escritural centrada en el evangelio, que presenta puntos de vista, metas y métodos, acordes a la revelación de Dios. El objetivo final de esta enseñanza es la conformación de la complejidad humana a la voluntad de Dios en cada circunstancia e interacción, por medio de una fe que transforma progresivamente al creyente gracias a la obra del Espíritu Santo y la influencia de las Escrituras.

“El objetivo principal de la consejería es proclamar la Palabra de Dios en la experiencia de una persona, con la esperanza de que el Espíritu produzca en ellos la fe en Cristo, la cual renueva las funciones dinámicas del corazón” (p. 185).

La dinámica del corazón en la vida cotidiana es un tratamiento académicamente competente, profundo, sensible, pastoral, teológicamente sólido, y agradable de leer, sobre la causa y dinámica de la expresión humana ante las circunstancias y relaciones en la tierra.

Oro que todo creyente sea iluminado por el Espíritu de Dios para comprender las nociones básicas presentadas en este libro, siendo equipado para ayudar a otros a vivir el propósito para el que fueron creados: amar a Dios con todo su ser y amar al prójimo como a sí mismos. Todo pastor, consejero, padre, amigo, creyente, psicólogo, sociólogo, psiquiatra, y toda persona abocada a orientar algún aspecto de la vivencia humana se beneficiará de leer esta obra.

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