En “El evangelio es”, Cole Brown busca ayudarnos a entender de forma concisa qué es el evangelio en realidad.
Después de explicarnos lo que el evangelio no es, Brown empieza a desarrollar su definición del evangelio en cada capítulo del libro. “El evangelio es la buena nueva de quien Jesús es y lo que Jesús ha hecho, para la gloria de Dios y el bien del pueblo de Dios” (p. 23).
Primero que nada, el evangelio es la buena nueva. La buena noticia. Cuando nos ponemos a meditar en por qué se le llama así, nos daremos cuenta que el evangelio de Jesús es completamente diferente a lo que cualquier otra religión ofrece.
“El cristianismo ofrece buenas nuevas mientras que todas las demás religiones ofrecen buenos consejos” (p. 29).
Mientras que toda otra religión nos ofrecerá consejos para que intentemos acercarnos a Dios, el evangelio de Jesús nos dice que Dios ya hizo todo para acercarse a nosotros. Esta nueva es buena, porque nos dice que la victoria contra el pecado ya nos ha sido dada por lo que Jesús hizo. También es la buena nueva —y no simplemente una buena nueva más— porque no hay otra manera en que podamos ser reconciliados con Dios.
Reconocer el evangelio como la buena nueva nos ayuda a rechazar cualquier falso evangelio que busque atraernos.
“Si oyes un evangelio que es principalmente acerca de lo que debes hacer en el futuro en lugar de lo que Jesús hizo en el pasado, debes rechazarlo completamente” (p. 32-33).
¿Quién es Jesús?
Si queremos conocer el evangelio de Jesús, necesitamos conocer al Jesús de este evangelio. No al de nuestra imaginación o al de las películas.
“Cualquier otro líder religioso nos ofrece decirnos acerca de Dios como una idea. Jesús nos ofrece conocer a Dios como una persona” (p. 40).
Jesús es como nadie más; es completamente Dios y completamente hombre. Solo el Dios-hombre podía vivir perfectamente, cargar con el peso de nuestro pecado, morir, y salir de la tumba en victoria.
Solo Él pudo habernos rescatado. ¡Gloria a Dios porque Él lo hizo!
