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Cada vez es más común pensar que el tener relaciones sexuales antes del matrimonio no es algo tan grave. “Después de todo”, dicen algunos, “nuestro amor es genuino y queremos casarnos”. No estamos hablando aquí de múltiples parejas ni de corazones rotos o embarazos no deseados.Tampoco sobre el riesgo de enfermedades de transmisión sexual. “¿Es realmente tan grave si tengo relaciones sexuales 24 horas antes de mi boda?”.

Creo que la razón por la que muchos jóvenes, aun cristianos, terminan teniendo relaciones sexuales antes del matrimonio es porque piensan que pueden evadir las consecuencias que normalmente presenta la iglesia y la sociedad. Ahora, ¿habrá alguna otra razón por la que este tema le importa tanto a Dios? ¿Habrá algo más que enfermedades sexuales y embarazos y corazones rotos? Creo que sí.

Abstinencia en la Palabra

La Biblia no habla de ETS’s y apenas menciona embarazos no deseados (¡aunque estas cosas son importantes y reales!). Pero sí habla en diversos pasajes de la abstinencia (Pr. 6:25-27; Hch. 15:20; 1 Co. 6:13; Ef. 5:3; Col. 3:5; 1 Ts. 4:3). Ahora bien, la razón que encontramos en la Biblia por la que la abstinencia es importante tiene más que ver con la gloria del evangelio que con las consecuencias temporales que nos afectan a nosotros.

A lo largo de la Escritura encontramos una analogía entre el matrimonio y la relación de Cristo con la iglesia. El buscar otros dioses se compara con el adulterio (de eso trata el libro de Oseas), y Efesios 5:21-33 dice que el trato de un esposo hacia su esposa es el misterio que se revela finalmente en lo que Jesús hizo y sigue haciendo por nosotros.

A la luz de esta realidad, tiene sentido que la abstinencia sexual antes del pacto matrimonial sea importante. ¿Qué estamos comunicando cuando nos adelantamos a la intimidad sexual sin estar casados? Estamos diciendo que puede haber intimidad y cercanía sin tener un pacto primero. Y como el pacto matrimonial muestra misteriosamente la relación de Cristo con su iglesia, estamos inadvertidamente diciendo que el mundo puede tener una relación íntima con Dios sin hacer primero un pacto a través del sacrificio de la cruz. Pero la Biblia es clara: si quieres tener comunión real con Dios debes entrar en el pacto que Él ha hecho. Es el nuevo pacto en la sangre de Jesús. No puedes brincarte esa parte y pasar directo a la intimidad y a los beneficios de estar unido a Dios.

Glorioso misterio

La abstinencia no se trata principalmente de no herir corazones, de embarazos no deseados, ni de enfermedades de transmisión sexual. El no sufrir estas consecuencias es solo un beneficio secundario. El mensaje de pureza sexual es un mensaje evangelístico porque le dice al mundo que el pacto es importante para Dios. Y todos los beneficios de cercanía e intimidad deben venir después de haber hecho un pacto de por vida.

Mostrémosle a nuestros jóvenes que la abstinencia se trata más sobre Dios que sobre ellos, y que su sexualidad no es solo algo personal. Hagámosles ver su sexualidad como un instrumento de Dios para salvar almas, utilizando la oportunidad que nos da el conocer el misterio del matrimonio para mostrar al mundo lo importante que es el pacto para Él, y cómo es posible tener intimidad con Dios a través de Jesús. Por eso vino Cristo: para hacer un pacto con su esposa. Sin ese pacto, nadie puede disfrutar de los beneficios de ser la esposa de Dios.

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