La Nueva Biblia de las Américas presenta una traducción dinámica, moderna y fiel a los idiomas originales. Es por eso que usa algunos sinónimos en español de la palabra “honesto” (RV60). Aquí hay 10 versículos bíblicos sobre la honestidad. Reflexiona en ellos a la luz del evangelio.
“Andemos decentemente [honestamente], como de día, no en orgías y borracheras, no en promiscuidad sexual y lujurias, no en pleitos y envidias” (Romanos 13:13)
“Esto digo para su propio beneficio; no para ponerles restricción, sino para promover lo que es honesto y para asegurar su constante devoción al Señor” (1 Corintios 7:35)
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable [honesto], si hay alguna virtud o algo que merece elogio, en esto mediten” (Filipenses 4:8)
“Exhorto, pues, ante todo que se hagan plegarias, oraciones, peticiones y acciones de gracias por todos los hombres, por los reyes y por todos los que están en autoridad, para que podamos vivir una vida tranquila y sosegada con toda piedad y dignidad [honestidad]” (1 Timoteo 2:1-2)
“Que gobierne bien su casa, teniendo a sus hijos sujetos con toda dignidad [honestidad]” (1 Timoteo 3:4)
“De la misma manera, también los diáconos deben ser dignos, de una sola palabra, no dados al mucho vino, ni amantes de ganancias deshonestas” (1 Timoteo 3:8)
“De igual manera, las mujeres deben ser dignas [honestas], no calumniadoras, sino sobrias, fieles en todo” (1 Timoteo 3:11)
“Porque el obispo debe ser irreprensible como administrador de Dios, no obstinado, no iracundo, no dado a la bebida, no pendenciero, no amante de ganancias deshonestas” (Tito 1:7)
“Porque hay muchos rebeldes, habladores vanos y engañadores, especialmente los de la circuncisión, a quienes es preciso tapar la boca, porque están trastornando familias enteras, enseñando por ganancias deshonestas, cosas que no deben” (Tito 1:10-11)
“Por tanto, a los ancianos entre ustedes, exhorto yo, anciano como ellos y testigo de los padecimientos de Cristo, y también participante de la gloria que ha de ser revelada: pastoreen el rebaño de Dios entre ustedes, velando por él, no por obligación, sino voluntariamente, como quiere Dios; no por la avaricia del dinero [ganancia deshonestas], sino con sincero deseo” (1 Pedro 5:1-2)