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La justicia se define comúnmente como la virtud de darle a cada uno lo que le corresponde. Sin embargo, la justicia en la Biblia tiene muchas más acepciones que nos permiten comprender la clase de “justicia” que Dios imparte y la que espera de los creyentes.

Estos son 60 versículos bíblicos sobre la justicia. Léelos a la luz del evangelio y reflexiona en ellos considerando sus diferentes significados.


“Y Abram creyó en el Señor, y Él se lo reconoció por justicia” (Génesis 15:6)

“No harás injusticia en el juicio; no favorecerás al pobre ni complacerás al rico, sino que con justicia juzgarás a tu prójimo” (Levítico 19:15)

“No harán injusticia en los juicios, ni en las medidas de peso ni de capacidad” (Levítico 19:35)

“Y habrá justicia para nosotros si cuidamos de observar todos estos mandamientos delante del Señor nuestro Dios, tal como Él nos ha mandado” (Deuteronomio 6:25)

“No es por tu justicia ni por la rectitud de tu corazón que vas a poseer su tierra, sino que por la maldad de estas naciones el Señor tu Dios las expulsa de delante de ti, para confirmar el pacto que el Señor juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob” (Deuteronomio 9:5)

“Él hace justicia al huérfano y a la viuda, y muestra Su amor al extranjero dándole pan y vestido” (Deuteronomio 10:18)

“La justicia, y solo la justicia buscarás, para que vivas y poseas la tierra que el Señor tu Dios te da” (Deuteronomio 16:20)

“Porque todo el que hace estas cosas, todo el que comete injusticia, es abominación para el Señor tu Dios” (Deuteronomio 25:16)

“David reinó sobre todo Israel, y administraba justicia y derecho a todo su pueblo” (2 Samuel 8:15)

“Ahora pues, que el temor del Señor esté sobre ustedes. Tengan cuidado en lo que hacen, porque con el Señor nuestro Dios no hay injusticia ni acepción de personas ni soborno” (2 Crónicas 19:7)

“¿Acaso tuerce Dios la justicia o tuerce el Todopoderoso lo que es justo?” (Job 8:3)

“Ofrezcan sacrificios de justicia, y confíen en el Señor” (Salmo 4:5)

“Señor, guíame en tu justicia por causa de mis enemigos; allana delante de mí tu camino” (Salmo 5:8)

“Y juzgará al mundo con justicia; con equidad ejecutará juicio sobre los pueblos” (Salmo 9:8)

“Pues el Señor es justo; Él ama la justicia; los rectos contemplarán Su rostro” (Salmo 11:7)

“Él restaura mi alma; me guía por senderos de justicia por amor de Su nombre” (Salmo 23:3)

“Él ama la justicia y el derecho; llena está la tierra de la misericordia del Señor” (Salmo 33:5)

“Defiendan al débil y al huérfano; hagan justicia al afligido y al menesteroso” (Salmo 82:3)

“La suma de tu palabra es verdad, y eterna cada una de tus justas ordenanzas” (Salmo 119:160)

“Guarda las sendas del juicio, y preserva el camino de Sus santos. Entonces discernirás justicia y juicio, equidad y todo buen sendero” (Proverbios 2:8-9)

“La justicia de los rectos los librará, pero los traidores en su codicia serán atrapados” (Proverbios 11:6)

“El impío recibe soborno bajo el manto para pervertir las sendas del derecho” (Proverbios 7:23)

“Lávense, límpiense, quiten la maldad de sus obras de delante de mis ojos. Cesen de hacer el mal. Aprendan a hacer el bien, busquen la justicia, reprendan al opresor, defiendan al huérfano, aboguen por la viuda” (Isaías 1:17)

“El aumento de Su soberanía y de la paz no tendrán fin sobre el trono de David y sobre su reino, para afianzarlo y sostenerlo con el derecho y la justicia desde entonces y para siempre. El celo del Señor de los ejércitos hará esto” (Isaías 9:7)

“No temas, porque Yo estoy contigo; no te desalientes, porque Yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia” (Isaías 4:10)

Este es Mi Siervo, a quien yo sostengo, mi escogido, en quien mi alma se complace. He puesto mi Espíritu sobre Él; Él traerá justicia a las naciones” (Isaías 42:1)

“Porque como la tierra produce sus renuevos, y como el huerto hace brotar lo sembrado en él, así el Señor Dios hará que la justicia y la alabanza broten en presencia de todas las naciones” (Isaías 61:11)

“Pero si alguien se gloría, gloríese de esto: ‘De que me entiende y me conoce, pues yo soy el Señor que hago misericordia, derecho y justicia en la tierra, porque en estas cosas me complazco’, declara el Señor” (Jeremías 9:24)

“Los entendidos brillarán como el resplandor del firmamento, y los que guiaron a muchos a la justicia, como las estrellas, por toda la eternidad” (Daniel 12:3)

“Aborrezcan el mal, amen el bien, y establezcan la justicia en la puerta. Tal vez el Señor, Dios de los ejércitos, sea misericordioso con el remanente de José” (Amós 5:15)

“Busquen al Señor, todos ustedes, humildes de la tierra que han cumplido Sus preceptos; busquen la justicia, busquen la humildad. Quizá serán protegidos el día de la ira del Señor” (Sofonías 2:3)

“Pero para ustedes que temen mi nombre, se levantará el sol de justicia con la salud en sus alas; y saldrán y saltarán como terneros del establo” (Malaquías 4:2)

“Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, pues ellos serán saciados” (Mateo 5:6)

“Bienaventurados aquellos que han sido perseguidos por causa de la justicia, pues de ellos es el reino de los cielos” (Mateo 5:10)

“Porque les digo a ustedes que si su justicia no supera la de los escribas y fariseos, no entrarán en el reino de los cielos” (Mateo 5:20)

“Cuídense de no practicar su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de otra manera no tendrán recompensa de su Padre que está en los cielos” (Mateo 6:1)

“Pero busquen primero Su reino y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas” (Mateo 6:33)

“¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas que pagan el diezmo de la menta, del anís y del comino, y han descuidado los preceptos más importantes de la ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad! Estas son las cosas que debían haber hecho, sin descuidar aquellas” (Mateo 23:23)

“Y cuando Él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio” (Juan 16:8)

“Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá” (Romanos 1:17)

“Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres, que con injusticia restringen la verdad” (Romanos 1:18)

“Pero ahora, aparte de la ley, la justicia de Dios ha sido manifestada, confirmada por la ley y los profetas. Esta justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo es para todos los que creen. Porque no hay distinción, por cuanto todos pecaron y no alcanzan la gloria de Dios” (Romanos 3:21-23)

“Todos son justificados gratuitamente por Su gracia por medio de la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios exhibió públicamente como propiciación por Su sangre a través de la fe, como demostración de Su justicia, porque en Su tolerancia, Dios pasó por alto los pecados cometidos anteriormente, para demostrar en este tiempo Su justicia, a fin de que Él sea justo y sea el que justifica al que tiene fe en Jesús” (Romanos 3:24-26)

“Porque si por la transgresión de un hombre, por este reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por medio de un Hombre, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia” (Romanos 5:17)

“Así pues, tal como por una transgresión resultó la condenación de todos los hombres, así también por un acto de justicia resultó la justificación de vida para todos los hombres” (Romanos 5:18)

“Porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación” (Romanos 10:10)

“No hago nula la gracia de Dios, porque si la justicia viene por medio de la ley, entonces Cristo murió en vano” (Gálatas 2:21)

“Pero tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la perseverancia y la amabilidad” (1 Timoteo 6:11)

“Huye, pues, de las pasiones juveniles y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que invocan al Señor con un corazón puro” (2 Timoteo 2:22)

“Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra” (2 Timoteo 3:16)

“Él nos salvó, no por las obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino conforme a Su misericordia, por medio del lavamiento de la regeneración y la renovación por el Espíritu Santo, que Él derramó sobre nosotros abundantemente por medio de Jesucristo nuestro Salvador, para que justificados por Su gracia fuéramos hechos herederos según la esperanza de la vida eterna” (Tito 3:5)

“Al presente ninguna disciplina parece ser causa de gozo, sino de tristeza. Sin embargo, a los que han sido ejercitados por medio de ella, después les da fruto apacible de justicia” (Hebreos 12:11)

“Esto lo saben, mis amados hermanos. Pero que cada uno sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para la ira; pues la ira del hombre no obra la justicia de Dios” (Santiago 1:19-20)

“Él mismo llevó nuestros pecados en Su cuerpo sobre la cruz, a fin de que muramos al pecado y vivamos a la justicia, porque por Sus heridas fueron ustedes sanados” (1 Pedro 2:24)

“Tampoco perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, un predicador de justicia, con otros siete, cuando trajo el diluvio sobre el mundo de los impíos” (2 Pedro 2:5)

“Pero, según Su promesa, nosotros esperamos nuevos cielos y nueva tierra, en los cuales mora la justicia” (2 Pedro 3:13)

“Si saben que Él es justo, saben también que todo el que hace justicia es nacido de Él” (1 Juan 2:29)

“Hijos míos, que nadie los engañe. El que practica la justicia es justo, así como Él es justo” (1 Juan 3:7)

“En esto se reconocen los hijos de Dios y los hijos del diablo: todo aquel que no practica la justicia, no es de Dios; tampoco aquel que no ama a su hermano” (1 Juan 3:10)

“Que el injusto siga haciendo injusticias, que el impuro siga siendo impuro, que el justo siga practicando la justicia, y que el que es santo siga guardándose santo” (Apocalipsis 22:11)

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