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La paciencia es un elemento que conforma el fruto del Espíritu Santo. Aquí tienes 18 versículos bíblicos sobre la paciencia, los cuales te ayudarán a comprender mejor en qué consiste y cómo opera en los hijos de Dios.

Te invitamos a leerlos a la luz del evangelio.


“Con la mucha paciencia se persuade al príncipe, y la lengua suave quebranta los huesos” (Proverbios 25:15).

“¿O tienes en poco las riquezas de Su bondad y tolerancia y paciencia, ignorando que la bondad de Dios te guía al arrepentimiento?” (Romanos 2:4).

Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, carácter probado; y el carácter probado, esperanza” (Romanos 5:3).

“Y que el Dios de la paciencia y del consuelo les conceda tener el mismo sentir los unos para con los otros conforme a Cristo Jesús” (Romanos 15:5).

“Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio propio; contra tales cosas no hay ley” (Gálatas 5:22-23).

Que vivan con toda humildad y mansedumbre, con paciencia, soportándose unos a otros en amor, esforzándose por preservar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz” (Efesios 4:2-3).

Entonces, ustedes como escogidos de Dios, santos y amados, revístanse de tierna compasión, bondad, humildad, mansedumbre y paciencia” (Colosenses 3:12).

“Tengan por sumo gozo, hermanos míos, cuando se hallen en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de su fe produce paciencia, y que la paciencia tenga su perfecto resultado, para que sean perfectos y completos, sin que nada les falte” (Santiago 1:2-4).

“Por tanto, hermanos, sean pacientes hasta la venida del Señor. Miren cómo el labrador espera el fruto precioso de la tierra, siendo paciente en ello hasta que recibe la lluvia temprana y la tardía” (Santiago 5:7).

“Sean también ustedes pacientes. Fortalezcan sus corazones, porque la venida del Señor está cerca” (Santiago 5:8).

“Por esta razón también, obrando con toda diligencia, añadan a su fe, virtud, y a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio, al dominio propio, perseverancia, y a la perseverancia, piedad, a la piedad, fraternidad y a la fraternidad, amor” (2 Pedro 1:5-7).

“Aquí está la perseverancia de los santos que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús” (Apocalipsis 14:12).

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