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En el primer siglo, la cruz era un instrumento de deshonra y justicia —según los estándares humanos—, pero gracias a Cristo la cruz significa para nosotros honra y gracia divina que redunda en nuestra salvación y la restauración de nuestra relación con Dios. Reflexiona en estos versículos bíblicos a la luz del evangelio.


“Ustedes saben que dentro de dos días se celebra la Pascua, y el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado” (Mateo 26:2)

“Pilato les dijo: ‘¿Qué haré entonces con Jesús, llamado el Cristo?’. ‘¡Sea crucificado!’, dijeron todos” (Mateo 27:22)

“Y habiendo crucificado a Jesús, se repartieron Sus vestidos echando suertes” (Mateo 27:35)

“Pilato, queriendo complacer a la multitud, les soltó a Barrabás; y después de hacer azotar a Jesús, lo entregó para que fuera crucificado” (Marcos 15:15)

“Diciendo que el Hijo del Hombre debía ser entregado en manos de hombres pecadores, y ser crucificado, y al tercer día resucitar” (Lucas 24:7)

“Entonces muchos judíos leyeron esta inscripción, porque el lugar donde Jesús fue crucificado quedaba cerca de la ciudad; y estaba escrita en hebreo, en latín y en griego” (Juan 19:20)

“Sabemos esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado con Cristo, para que nuestro cuerpo de pecado fuera destruido, a fin de que ya no seamos esclavos del pecado” (Romanos 6:6)

“¿Está dividido Cristo? ¿Acaso fue Pablo crucificado por ustedes? ¿O fueron bautizados en el nombre de Pablo?” (1 Corintios 1:13)

“Pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, piedra de tropiezo para los judíos, y necedad para los gentiles” (1 Corintios 1:23)

“Porque nada me propuse saber entre ustedes excepto a Jesucristo, y este crucificado” (1 Corintios 2:2)

“Porque ciertamente Él fue crucificado por debilidad, pero vive por el poder de Dios. Así también nosotros somos débiles en Él, sin embargo, viviremos con Él por el poder de Dios para con ustedes” (2 Corintios 13:4)

“Con Cristo he sido crucificado, y ya no soy yo el que vive, sino que Cristo vive en mí; y la vida que ahora vivo en la carne, la vivo por la fe en el Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20)

“¡Oh, gálatas insensatos! ¿Quién los ha fascinado a ustedes, ante cuyos ojos Jesucristo fue presentado públicamente como crucificado?” (Gálatas 3:1)

“Pues los que son de Cristo Jesús han crucificado la carne con sus pasiones y deseos” (Gálatas 5:24)

“Pero jamás acontezca que yo me gloríe, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por el cual el mundo ha sido crucificado para mí y yo para el mundo” (Gálatas 6:14)

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