Las Escrituras enseñan que la obediencia que brota de la fe busca dar gloria a Dios. Cristo obedeció al Padre y se despojó de su gloria, vino en forma de siervo y vivió en obediencia perfecta. Aunque los creyentes no somos perfectos, podemos esforzarnos por obedecer los mandamientos de Dios por la obra perfecta de Cristo en nosotros.
Aquí tienes nuestra lista de 14 versículos bíblicos sobre la obediencia. Reflexiona en ellos tomando en cuenta que por la obediencia de Cristo hoy disfrutamos los beneficios del evangelio.
“Es por medio de Él que hemos recibido la gracia y el apostolado para promover la obediencia a la fe entre todos los gentiles, por amor a Su nombre” (Romanos 1:5).
“Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de Uno los muchos serán constituidos justos” (Romanos 5:19).
“¿No saben ustedes que cuando se presentan como esclavos a alguien para obedecerle, son esclavos de aquel a quien obedecen, ya sea del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia?” (Romanos 6:16).
“Porque no me atreveré a hablar de nada sino de lo que Cristo ha hecho por medio de mí para la obediencia de los gentiles, en palabra y en obra” (Romanos 15:18).
“Porque la noticia de la obediencia de ustedes se ha extendido a todos. Por tanto, me regocijo por ustedes, pero quiero que sean sabios para lo bueno e inocentes para lo malo” (Romanos 16:19).
“Y su amor hacia ustedes abunda aún más al acordarse de la obediencia de todos ustedes, y de cómo lo recibieron con temor y temblor” (2 Corintios 7:15).
“Por la prueba dada por esta ministración, glorificarán a Dios por la obediencia de ustedes a la confesión del evangelio de Cristo, y por la liberalidad de su contribución para ellos y para todos” (2 Corintios 9:13).
“Porque las armas de nuestra contienda no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas; destruyendo especulaciones y todo razonamiento altivo que se levanta contra el conocimiento de Dios, y poniendo todo pensamiento en cautiverio a la obediencia de Cristo, y estando preparados para castigar toda desobediencia cuando la obediencia de ustedes sea completa” (2 Corintios 10:4-6).
“Que nadie los engañe con palabras vanas, pues por causa de estas cosas la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia” (Efesios 5:6).
“Te escribo confiado en tu obediencia, sabiendo que harás aún más de lo que digo” (Filemón 1:21).
“Aunque era Hijo, aprendió obediencia por lo que padeció” (Hebreos 5:8).
“Puesto que en obediencia a la verdad ustedes han purificado sus almas para un amor sincero de hermanos, ámense unos a otros entrañablemente, de corazón puro” (1 Pedro 1:22).