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4 formas en que los líderes juveniles deben responder cuando los estudiantes abandonan la fe

Nunca podrás saber si la fe de alguien perdurará o se desvanecerá. En mis 15 años de trabajo en el ministerio juvenil, he visto a los que eran líderes estudiantiles abandonar completamente a Cristo en su segundo año de universidad. Sin embargo, otros que mostraban indecisión espiritual en la secundaria, hoy sirven en el ministerio pastoral.

La salvación es un regalo de Dios y los pastores de jóvenes aprenden con mucha rapidez que las pasiones espirituales de los adolescentes son poco confiables a la hora de predecir su trayectoria a largo plazo. Esto no socava la validez o el significado de nuestro ministerio, pero es un recordatorio de jugar el juego todo el partido mientras dejamos de llevar el puntaje basado en la fructificación a corto plazo.

A los padres les duele cuando sus hijos se alejan de Jesús. También a los pastores de jóvenes.

Hemos invertido años de nuestra vida predicándoles el evangelio. Nos sentamos a ver sus partidos de baloncesto, soportamos conversaciones incómodas en la cafetería y los asesoramos durante las crisis de identidad en su adolescencia, incluyendo sus desamores. También bautizamos a algunos de ellos. Los vimos en la cima de la montaña cuando algo que habían escuchado miles de veces en la escuela dominical finalmente les hace clic, cuando pueden ver claramente la bondad de Dios en su vida y cuando Dios los usó para ministrar a un amigo.

A los padres les duele cuando sus hijos se alejan de Jesús. También a los pastores de jóvenes

Cuando los estudiantes dejan la fe, esto golpea nuestro corazón de una manera que pocos comprenden. Recientemente compartí lo que he aprendido sobre cómo los pastores de jóvenes pueden preparar a los estudiantes para una fe duradera (en inglés). Este es mi mejor intento en ayudar a arrojar luz, y espero que algo de aliento, sobre cómo los pastores de jóvenes deben responder cuando los estudiantes abandonan la fe. 

1. Toma un tiempo para llorar

Puede ser tentador pasar por alto la tristeza y el dolor. No lo hagas.

Nadie sirve en el ministerio de jóvenes por el sueldo o porque es una buena manera de ganarse el respeto. Pastorean a los adolescentes porque el Señor los ha llamado a dirigir a los estudiantes a Jesús. Los líderes juveniles se involucran con los estudiantes de maneras significativas. Aún ahora, me considero pastor de los estudiantes que se graduaron de mi ministerio hace 15 años. Si me necesitaran, estaría allí en un abrir y cerrar de ojos.

Entonces, cuando uno de ellos se aleja de Jesús, el dolor es real.

Jesús comprende lo que se siente cuando discípulos amados pierden la fe. Algunos (Pedro) regresan y otros no (Judas). En ambos escenarios, los líderes juveniles pueden encontrar afinidad en el Varón de Dolores. Llora la pérdida de fe de un joven adulto, pero no de una manera que provoque autocompasión o amargura. Deja que tu dolor alimente tu oración por estos estudiantes, suplicándole al Señor que reavive su fe.

2. Confía en el Señor

Es natural preguntarse si pudiste haber hecho algo de una manera diferente. ¿Debí darle más seguimiento durante su primer año de universidad? ¿Debí haber sido más intencional en conectarlos con un ministerio universitario o una iglesia saludable una vez que se fueron de casa? ¿Podría haber abordado preventivamente algunas de las preguntas difíciles que ahora debilitan su fe?

Debido a la gracia de Dios, no hay necesidad de vivir con culpa o autocompasión por lo que se pudo haber hecho de una manera diferente. La salvación es la obra misericordiosa de Dios. Punto. En lugar de concentrarte en lo que te hubiese gustado haber hecho, confíale al Señor el futuro de esos estudiantes. 

En lugar de concentrarte en lo que te hubiese gustado haber hecho, confíale al Señor el futuro de estos estudiantes

El pastor de jóvenes que hay en mí quiere abrazar a mis estudiantes que han perdido la fe y escucharlos con una buena taza de café. Realmente quiero escucharlos: tanto lo que dicen como lo que no dicen. Quiero recordarles que el evangelio es un mensaje de buenas nuevas de gran gozo. Quiero advertirles sobre lo que están arriesgando al alejarse de la salvación de Dios. 

3. No te rindas

Muchos de los que han deconstruido formalmente su fe ahora te considerarán su enemigo espiritual. Escuché de estudiantes que dijeron que necesitaban consejería para deshacer las cosas dañinas y destructivas que aprendieron en la iglesia. La verdad de 1 Corintios 1:23 es un fuerte choque de realidad, como lo es el mensaje de Jesús a sus discípulos: “El que a ustedes escucha, me escucha a Mí, y el que a ustedes rechaza, me rechaza a Mí; y el que me rechaza a Mí, rechaza al que me envió” (Lc 10:16).

Lo que un pastor puede hacer por alguien que rechaza totalmente el evangelio no es mucho.

Al mismo tiempo, los buenos pastores persiguen a las ovejas perdidas. Sé fiel y da seguimiento a los jóvenes adultos que están cuestionando o deconstruyendo su fe. Aprovecha las oportunidades para estar disponible para escuchar sus preguntas y caminar con ellos. (Quizás envíales una copia de Before You Lose Your Faith [Antes de que pierdas tu fe] y ofrécete a discutir el libro con ellos). Intercede por ellos por nombre ante el trono de la gracia, mientras recuerdas que no eres su salvador y que no determinas su salvación. Orar por sabiduría puede parecer una respuesta tan obvia, pero fácilmente es pasada por alto. 

4. Sigue jugando el juego por todo el partido

He visto a muchos estudiantes alejarse de la fe después de la escuela secundaria. He tenido temporadas de agonía significativa en las que me pregunto: ¿Qué estoy haciendo? y ¿Vale la pena? Pero me he mantenido firme porque el Señor ha puesto una carga continua en mi vida por alcanzar a la próxima generación con el evangelio, y porque estoy comprometido a jugar todo el partido hasta el final. 

Como escribí en mi libro A Biblical Theology of Youth Ministry (Una teología bíblica del ministerio juvenil): “El objetivo del ministerio juvenil no es producir cristianos adolescentes. En cambio, el propósito del ministerio juvenil es producir discípulos adultos cuya fe echó raíces y se nutrió durante la adolescencia”.

El propósito del ministerio juvenil es producir discípulos adultos cuya fe echó raíces y se nutrió durante la adolescencia

Es fácil desanimarse por los estudiantes que se alejan de la fe. Pero hay otros cuya fe comienza a tomar forma después de que se gradúan de la secundaria. Es frecuente que  ellos regresen y te cuenten todas las cosas que están aprendiendo que “nunca antes habían escuchado”, a pesar de que lo escucharon todas las semanas en el grupo de jóvenes. Pero sus corazones estaban endurecidos en ese momento. En lugar de resentirte, celebra que jugaste un papel en crear la chispa que Dios eventualmente encendió y avivó en llamas.

Dios está obrando de mil maneras que no puedes ver. A veces, los estudiantes pierden la fe; a veces su fe cobra vida. De cualquier manera, no te desanimes. Persevera en tu llamado pastoral de alimentar a las ovejas de Dios. Descansa en la verdad de que Jesús todavía está edificando su iglesia.


Publicado originalmente en The Gospel Coalition. Traducido por Equipo Coalición.
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