El matrimonio es un regalo de Dios, diseñado a la perfección con el propósito de exaltar Su Nombre y reflejar la unión de Cristo y su iglesia, y de proveer compañía a nosotros, sus hijos.
Cada matrimonio tiene diferentes temporadas, y en algunos matrimonios pueden haber momentos donde la esposa ya no sienta amor por su marido, ya no tenga deseos de respetarlo o de servirle, y puede que tenga un corazón seco hacia el hombre que Dios le dio.
En este video quiero hablarte de esto: De qué cosas debemos examinar en nuestras vidas si estamos viviendo una etapa así en nuestro matrimonio, qué podemos hacer frente a esta falta de amor, y algunas cosas que necesitamos recordar. Recuerda la advertencia de nuestro Señor Jesucristo: “Por tanto, cualquiera que oye estas palabras mías y las pone en práctica, será semejante a un hombre sabio que edificó su casa sobre la roca” (Mat. 7:24). Tú y yo queremos que nuestros matrimonios estén edificados sobre roca sólida.