¡Únete a nosotros en la misión de servir a la Iglesia hispana! Haz una donación hoy.

×

Recientemente salió a la luz el reporte de una investigación (enlaces en inglés) solicitada por la Convención Bautista del Sur (SBC), de los Estados Unidos, en el que se revela cómo el comité ejecutivo de la denominación cubrió deliberadamente denuncias de abuso sexual dentro de iglesias de la denominación.

Esto resulta de impacto para creyentes fuera de los Estados Unidos, debido a que la SBC (por medio de su junta misionera) es una de las fuerzas misioneras más robustas en el mundo.

El reporte, comisionado a la firma investigadora Guidepost Solutions, detalla a lo largo de 288 páginas diferentes casos de abusos sexuales y denuncias que involucran incluso a un expresidente de la denominación SBC. El documento declara:

Durante casi dos décadas, los sobrevivientes de abuso y otros bautistas del sur preocupados se han puesto en contacto con el Comité Ejecutivo (CE) de la Convención Bautista del Sur (SBC) para denunciar a los abusadores de niños y otros abusadores que estaban en el púlpito o empleados como personal de la iglesia… Hicieron llamadas telefónicas, enviaron cartas, enviaron correos electrónicos, aparecieron en las reuniones de la convención y el comité, realizaron mítines y se comunicaron con la prensa… solo para encontrarse, una y otra vez, con resistencia, obstrucciones e incluso abierta hostilidad por parte de algunos dentro del CE.

El reporte también concluyó:

La actitud prevaleciente de algunos líderes del CE fue que la SBC no tenía la responsabilidad de abordar la crisis de abuso sexual dentro de las iglesias porque, bajo la política de la SBC, esas iglesias eran autónomas, estaban a cargo de su propia contratación y no estaban bajo el control de la SBC. Cuando las denuncias de abuso se presentaron ante el CE, incluidas las denuncias de que los delincuentes sexuales condenados aún estaban en el ministerio, los líderes del CE generalmente no discutieron esta información fuera de su círculo íntimo, a menudo no respondieron al sobreviviente y no tomaron ninguna medida para abordar estas denuncias para prevenir el abuso continuo o tal abuso en el futuro.

Puedes leer más detalles sobre el reporte y su contexto aquí.

Momento de cilicio

Las respuestas a esto no se han hecho esperar dentro de líderes evangélicos. Destacan la del pastor Russell Moore, quien desde hace años pidió una investigación de este tipo y abandonó la denominación hace un tiempo, y también la del pastor Albert Mohler, presidente del seminario principal de la denominación. Él compartió:

Los bautistas del sur deben ver este informe como parte de un ajuste de cuentas que revelará la ira de Dios, pero también Su misericordia, cada una en la justa proporción. Algunos ven este informe como una oportunidad para condenar a la SBC y castigar a sus iglesias, miembros y líderes por oponerse implacablemente a enfrentar este desafío con gracia, verdad, compasión y el poder del evangelio. No creo que sea así. Fue la SBC la que exigió que se hiciera esta investigación.

La verdad es que este informe muestra a los bautistas del sur de la peor manera. Tenemos que enfrentar ese hecho. Pero debo seguir adelante con la confianza, basada en una larga experiencia, de que los fieles laicos, pastores y líderes denominacionales bautistas del sur harán lo correcto, una vez que sepan qué es lo correcto.

Este es un momento de cilicio y cenizas. Ahí es donde tenemos que empezar. El evangelio de Cristo deja en claro que no es ahí donde puede terminar la historia. Pero vamos a estar vestidos de cilicio por algún tiempo.

Respondiendo con acciones

¿Cómo prevenir futuros encubrimientos de abusos? El periodista Joe Carter resume así las recomendaciones claves del reporte para la SBC:

  • Formar una comisión independiente y luego establecer una entidad administrativa permanente para supervisar reformas integrales a largo plazo relacionadas con el abuso sexual y la mala conducta relacionada dentro de la SBC.
  • Crear y mantener un sistema de información de delincuentes para alertar a la comunidad sobre delincuentes conocidos. Poner este sistema a disposición de las iglesias de forma voluntaria.
  • Proporcionar una caja de herramientas de recursos integral que incluye protocolos, capacitación, educación e información práctica.
  • Crear un programa voluntario de autocertificación para iglesias, asociaciones locales, convenciones estatales y entidades basado en la implementación de «mejores prácticas» para crear conciencia y mejorar la prevención del abuso sexual.
  • Mejorar los controles de gobernabilidad, incluido el uso de verificaciones de antecedentes mejoradas, cartas de buena reputación y códigos de conducta para fortalecer voluntariamente los estándares de contratación y mejorar la gobernabilidad.
  • Restringir el uso de acuerdos de no divulgación y acuerdos civiles que obligan a los sobrevivientes a la confidencialidad en asuntos de abuso sexual, a menos que lo solicite el sobreviviente.
  • Adoptar una «Declaración de principios» que establezca estándares fundamentales sobre cómo se manejarán las denuncias de abuso sexual en todos los niveles de la SBC, y cómo se tratará a quienes denuncien en el futuro. Estos principios pueden proporcionar un modelo para que las entidades de la SBC, las convenciones estatales, las asociaciones locales y las iglesias locales los adopten y los sigan.
  • Reconocer a aquellos que han sido afectados por el abuso sexual del clero de SBC, a través de una disculpa sincera y un gesto tangible, y priorizando la provisión de atención compasiva a los sobrevivientes a través de un apoyo dedicado de defensa de sobrevivientes y un fondo de compensación para sobrevivientes.

Por su parte, el pastor Griffin Gulledge ofrece las siguientes recomendaciones (en inglés) sobre cómo los miembros de iglesias de la SBC y cristianos en general pueden responder a las noticias de este reporte:

 

1) No mires hacia otro lado.

En momentos como estos, todos estamos tentados a decir: «Esto no me pertenece». Estamos tentados a preguntar: «¿Es ese mi problema?». Es un eco de la excusa pronunciada al este del Edén: «¿Soy yo el guardián de mi hermano?» (Gn 4:9). La respuesta a esa pregunta siempre fue . Ha ocurrido tanto maltrato y abuso porque bautistas se negaron a mirar, se negaron a aprender y se negaron a escuchar. Sin duda, esto es doloroso. Pero como la luz se derrama en un lugar oscuro, no cierres los ojos ni te niegues a ver. Infórmate sobre la difícil situación de los abusados. Lee el informe. Aprende a ayudar.

2) No minimices.

Algunos tendrán la tentación de decir: «Esto son solo algunas manzanas podridas» o «La mayor parte de eso fue en el pasado». La humildad requiere que admitamos honestamente: «No tenemos idea de cuánto de esto continúa ahora». Este informe, de alcance limitado, es la primera palabra sobre el abuso en nuestra convención, no la última. Saldrán más.

Un escándalo similar destruyó el testimonio y la reputación de la Iglesia Católica Romana. La página 58 del informe documenta cómo el sacerdote católico Thomas Doyle escribió a los líderes de la SBC en marzo de 2007. Expresó su preocupación de que los líderes de la SBC pudieran estar cayendo en algunos de los mismos patrones de los líderes católicos al no lidiar con el abuso sexual del clero, e instó a los bautistas del sur a aprender de los errores católicos tomando acciones tempranas para implementar reformas estructurales. Lamentablemente, su advertencia fue desestimada por los líderes de la SBC. El sacerdote respondió que tales reacciones son «estándar para las personas en puestos de liderazgo de la iglesia, que tienden a anteponer las necesidades de la institución a sus obligaciones cristianas».

No podemos seguir descartando advertencias. Debemos aprender la humildad y dejar de fingir que esto es exagerado.

3) No te quedes callado.

Debemos escuchar y aprender. También debemos hablar. Una fuente de dolor claro a lo largo del informe es la frecuencia con la que las víctimas de abuso se quedaron solas mientras luchaban por reformas. Si leemos este informe y no podemos encontrar nuestra voz, ¿en qué nos diferenciamos de aquellos en Santiago 2:16 que dicen: «¡Calentaos y llenaos!» y luego se niegan a dar comida y ropa?

4) No te alejes.

Este último punto está dirigido a mis hermanos y hermanas bautistas del sur más que a los cristianos en general. Es probable que muchos de ustedes estén listos para marcharse en este punto. ¿Pero de quién te alejas? Ahora sabemos que nuestros líderes, nuestro dinero y nuestras instituciones dañan a la gente. ¿Podemos decir con la conciencia tranquila: «Terminé»? En este momento en que la justicia clama, ¿nos atrevemos a alejarnos? Esta es la hora de hablar, de negarse a ceder, de luchar por la justicia y la misericordia que Dios requiere de nosotros. Alejarse de la SBC ahora es alejarse de las víctimas. Alejarse ahora es alejarse de nuestra responsabilidad…

… Mi oración es que los bautistas vivan de acuerdo con la Palabra infalible en la que creemos y encuentren la resolución de caminar de una manera digna del Señor (Col 1:10), sin importar el costo. Dios nos ayude.

Recibe cada día los artículos, podcasts, y vídeos más recientes.
CARGAR MÁS
Cargando