Yo crecí como cristiano en Egipto, un lugar donde muchos de mis vecinos y compañeros de clase se llamaban «Mahoma». Desde muy temprana edad, aprendí el significado de ese nombre —el nombre de su profeta— para los musulmanes que me rodeaban. Los musulmanes aprecian, aman y respetan a Mahoma. También creen que el uso de su nombre trae bendiciones a sus vidas.
Ahora vivo en Estados Unidos. A medida que más musulmanes llegan a este país, creo que los cristianos alrededor del mundo necesitan saber más acerca de lo que los musulmanes entienden sobre su profeta. Aquí hay nueve cosas que deberías saber sobre Mahoma.
1. Mahoma fue probablemente una figura histórica.
Mahoma nació, según se dice, en La Meca en el año 570 y murió en Medina en el 632 d. C. Muchos son escépticos en cuanto a la información sobre su vida porque los relatos musulmanes se documentaron unos dos siglos después de su muerte. No disponemos de relatos de testigos presenciales. Esto es problemático, ya que no podemos confiar plenamente en los registros sobre él. Sin embargo, tenemos razones para creer que Mahoma fue una figura histórica. Algunos cristianos del siglo VII escribieron sobre un predicador que apareció entre los árabes, pero lo identificaron como un falso profeta porque venía con espadas y carros.
2. Probablemente fue influenciado por cristianos.
Los musulmanes creen que Mahoma recibió su revelación directamente de Alá a través del ángel Gabriel y se convirtió en profeta a los cuarenta años. Insisten en que no hubo intervención humana en el proceso.
Sin embargo, la misma narrativa musulmana revela que Mahoma tuvo entre nueve y doce años cuando se reunió con un monje cristiano en Siria. El monje le contó relatos cristianos. Además, cuando Mahoma supuestamente recibió su primera revelación divina, acudió al primo de su esposa, que también era cristiano y experto en la Biblia hebrea. Por tanto, aunque los musulmanes insisten en que Mahoma no tuvo ninguna influencia de los cristianos, su historia revela lo contrario.
3. Los musulmanes consideran que Mahoma es perfecto.
Los musulmanes consideran a Mahoma como el último profeta de Alá, el último y el mejor de una cadena de miles de profetas (que incluye a los profetas de la Biblia). Los musulmanes lo ven como el único hombre perfecto que ha existido. Aunque los relatos históricos pueden poner en duda esta imagen idealista —ya que se pueden identificar hechos cuestionables y enseñanzas problemáticas—, los musulmanes siguen venerando a Mahoma y creen que era infalible.
4. Vivió en La Meca y en Medina.
Mahoma vivió en La Meca durante cincuenta y tres años, y luego en Medina durante diez. Tras convertirse supuestamente en profeta en La Meca, vivió allí durante unos trece años, intentando predicar su mensaje religioso. Pero no logró imponerse. La gente se burlaba y lo perseguía a él y a su puñado de seguidores. Tras años de fracaso e intensa presión, tomó a sus pocos seguidores y emigró a Medina, donde vivió la última década de su vida. En Medina pudo consolidar su poder y acumular recursos. Allí se convirtió en comandante y estadista.
5. Lanzó ataques contra muchos no musulmanes.
Tras ser débil y vulnerable en La Meca, Mahoma se convirtió en un fuerte líder militar en Medina. Fuentes musulmanas revelan que lanzó docenas de incursiones militares contra diversos grupos, tanto politeístas, judíos y también cristianos. Gracias a estas incursiones, Mahoma se hizo tan poderoso como líder tribal árabe que muchas tribus se sometieron a él y declararon así su conversión al islam. La palabra misma islam significa «sumisión» y «rendición».
6. No hizo milagros (¿o sí?).
El Corán insiste en que el único milagro de Mahoma es el propio Corán. Alá envió a Mahoma simplemente para advertir. Dice Alá que, debido a que la gente de las generaciones pasadas no creía por medio de milagros, entonces el único milagro que se le dio a Mahoma fue el Corán y eso fue suficiente.
Sin embargo, las generaciones posteriores de musulmanes, tras sus interacciones con judíos y cristianos, sintieron la necesidad de generar historias sobre los milagros de Mahoma. Si Moisés y Jesús hicieron milagros, la lógica dice que Mahoma también debe haber hecho lo mismo, aunque esto contradiga las escrituras del islam.
7. Tuvo múltiples esposas y concubinas.
Mahoma tuvo muchas esposas. El número exacto se discute, pero tuvo entre nueve y doce. También tuvo muchas concubinas y esclavas. Los musulmanes dicen que se casó con estas mujeres para cuidarlas después de que perdieran a sus maridos. Otros creen que estos matrimonios fueron por razones económicas y políticas. Entre las esposas encontramos algunas notables: Khadija era la más rica. Sawda era la mayor. Aisha era la más joven: se casó con ella a los seis años y consumó el matrimonio a los nueve. Zaynab era la esposa de su hijo adoptivo, pero Alá revocó más tarde esa adopción, permitiendo a Mahoma casarse con ella. Safiyya era una mujer judía que se casó con Mahoma después de que éste asaltara su tribu y matara a su marido.
8. Murió por envenenamiento.
Las fuentes musulmanas revelan que Mahoma no murió de forma natural, sino que fue envenenado. Los musulmanes suníes acusan a una mujer judía de envenenar a Mahoma. Por su parte, algunos chiíes sostienen que dos de las esposas de Mahoma conspiraron para matarlo y preparar el camino para que sus padres lo sucedieran en el gobierno de los árabes. Dado que la historia del envenenamiento de un profeta pone en duda la protección divina, muchos musulmanes afirman que los relatos de las fuentes musulmanas son falsos y que Mahoma murió por causas naturales.
9. Su tumba está en Medina.
Fuentes musulmanas también revelan que Mahoma murió en su casa de Medina y fue enterrado. Hasta el día de hoy, los musulmanes creen que su tumba es la que bendice a Medina. Buscan visitar la ciudad para ser bendecidos. El nombre «Medina» significa «La Ciudad» (es decir, la ciudad bendecida de Mahoma).
Por supuesto, hay mucho más que decir sobre la vida y las enseñanzas de Mahoma. Pero los cristianos deberían conocer estos hechos básicos cuando se relacionan con amigos, vecinos y compañeros de trabajo musulmanes. Para aquellos que quieran saber más, he escrito el libro A Concise Guide to the Life of Muhammad [Una guía concisa de la vida de Mahoma]. Los cristianos podrán hablar mejor de nuestra esperanza en Cristo a los musulmanes que los rodean cuando aprenden sobre el profeta del islam.