¿Qué es realmente la enseñanza cristiana? ¿Quién debe enseñar en la iglesia y cómo debe hacerlo? ¿Cuáles son las características espirituales que alguien debe poseer para servir en el ministerio de la enseñanza?
Estas preguntas deben ser respondidas bien en nuestras iglesias. Pensando en eso, el Instituto de Expositores está ofreciendo gratis el curso Fundamentos de la enseñanza cristiana (haz clic en el enlace para leer más información e inscribirte). Ideal para realizar desde tu casa mientras estás en cuarentena.
Esta clase, diseñada para ser cursada en 10 semanas, cuenta con cinco profesores reconocidos por su fidelidad al enseñar la Biblia: Luis Carballosa, Sugel Michelén, Henry Tolopilo, Luis Contreras, y Josías Grauman. Ya que todo cristiano debe enseñar a otros (Col 3:16), todo cristiano puede beneficiarse del curso.
Tuve la oportunidad de entrevistar al pastor Josías Grauman sobre esta clase y la importancia de comprender bien la enseñanza cristiana. A continuación la entrevista.
¿Cómo describirías la importancia de entender mejor qué es la enseñanza cristiana?
Es vital entender qué es la enseñanza cristiana porque Dios llama a cada cristiano a enseñar a otros (Col. 3:16; Mt. 28:20). Entonces, si no lo hacemos de la forma que Dios prescribe, pecamos contra Él. Además, nadie puede llegar a la salvación sin que alguien le enseñe el evangelio (Ro. 10:14) y nadie puede crecer en santificación sin un entendimiento correcto de la Palabra de Dios (Jn. 17:17).
Es vital entender qué es la enseñanza cristiana porque Dios llama a cada cristiano a enseñar a otros
Ya que la salud de la iglesia local depende del alimento que recibe, es imprescindible identificar y consumir alimento saludable: la verdad de Dios. Solo cuando esto ocurre, la iglesia puede cumplir con su función de ser “columna y baluarte de la verdad” (1 Ti. 3:15).
¿Cuáles son los peligros de tener una idea errada de la enseñanza cristiana?
Lamentablemente, muchos cristianos tienen falta de discernimiento en el área de la enseñanza. Esto se prueba por la gran cantidad de cristianos que escuchan falsa enseñanza sin darse cuenta. Es más, muchos cristianos ni siquiera reconocen el rol que juega la enseñanza de la Palabra de Dios en sus vidas.
Si un cristiano no entiende el papel de la enseñanza correcta en su propia santificación—y en la salvación y santificación de otros—no se expondrá a sí mismo, ni a otros, al único medio que Dios usa para transformar al hombre. Además, si un cristiano no entiende las características bíblicas, tanto del maestro como de su enseñanza, será tambaleado por los distintos vientos de doctrina que buscan engañarnos.
¿Cuáles son las características espirituales de alguien llamado a la enseñanza de la Biblia?
Todo cristiano está llamado a enseñar. Los padres deben enseñar a sus hijos (Ef. 6:4). Debemos enseñar la verdad de Dios a nuestros vecinos y otros incrédulos (Col. 1:28). Y cada cristiano debe enseñar el uno al otro (Col 3:16). Además, todo cristiano está llamado a vivir en obediencia a Dios, para que no viva en hipocresía, enseñando una cosa y haciendo lo opuesto.
El maestro calificado es aquel que entiende la gran responsabilidad de enseñar la Palabra de Dios
Sin embargo, aunque todo cristiano está llamado a enseñar al nivel individual, Dios ha llamado a ciertos hombres a enseñar en público en la iglesia local. Estos hombres deben ser calificados según los requisitos que Pablo detalla en 1 Timoteo 3:1-7, y si no lo son, no deben enseñar en la iglesia. Deben ser hombres santos, mansos, justos, y sin los vicios contra los cuales estarán predicando.
Por último, el maestro calificado es aquel que entiende la gran responsabilidad de enseñar la Palabra de Dios. Sabe que debe manejar con precisión la Palabra de verdad (2 Tim 2:15), y entonces busca sujetar todo su ser a la Escritura en todo momento.
¿Cuáles son los errores más comunes que cometemos en relación a la enseñanza en nuestras iglesias y por qué?
Lamentablemente, el error más común es el abandono de la autoridad de la Escritura en la enseñanza cristiana. Interpretaciones torcidas al gusto, hermenéutica experimental, y predicaciones vacías de la Palabra de Dios inundan nuestros púlpitos. Se concentran más en lo que el texto significa para nosotros, en vez de identificar primero la intención del autor.
¿La razón? Muchos predicadores se han avergonzado del mensaje contracultural y exclusivo de la Biblia ante la presión de un mundo que en su pecado rechaza este mensaje. Pero esto no debe sorprendernos, ya que Pablo profetizó que “vendrá tiempo cuando no soportarán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oídos, conforme a sus propios deseos, acumularán para sí maestros, y apartarán sus oídos de la verdad, y se volverán a los mitos” (2 Ti. 4:3–4).
Otro error serio es tener hombres no calificados en roles de liderazgo o pastorales. Esto ha generado que el estándar bíblico se degrade y que la iglesia local tome a la ligera las demandas de la Escritura. Si el pastor no está dispuesto a someterse al estándar de la Escritura, ¿por qué la iglesia lo estaría?
¿Cómo el curso Fundamentos de la enseñanza cristiana puede servir a la iglesia? ¿Cuál es el fruto que espera de este curso en la vida de los estudiantes?
Primordialmente, deseamos que el Señor sea glorificado conforme los alumnos son expuestos a verdades de la Escritura, y que el Espíritu Santo use esas verdades para hacerlos más a la imagen de Cristo. Oramos que Él use este curso para traer un impacto grande sobre la enseñanza de muchas iglesias, para que puedan someterse a la autoridad de la Escritura en todo aspecto. Finalmente, oramos que traiga beneficios saludables sobre las iglesias locales para que el evangelio sea proclamado con mayor fidelidad.
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