“Se levantará sobre el polvo”: Una reflexión pastoral sobre la tragedia del 8 de abril
«En un mundo tan roto como el nuestro, demos gracias porque las tragedias no son normales y, sobre todo, que tenemos un Dios a quien acudir en medio del dolor».
«En un mundo tan roto como el nuestro, demos gracias porque las tragedias no son normales y, sobre todo, que tenemos un Dios a quien acudir en medio del dolor».
En medio de mis muchas aflicciones, lo natural sería la queja, pero los seguidores de Jesucristo tenemos un llamado más elevado.
Pidámosle al Señor que aun entre lágrimas, nos permita tener ojos abiertos para ver Sus bondades sobre nuestras vidas.
Aunque hay muchas armas espirituales para combatir la tentación, Pablo nombra una que parece inesperada: ser agradecidos.
No importa si el futuro luce sombrío o brillante, complicado o prometedor, aparta un tiempo antes de tomar decisiones para recordar el evangelio.