Luchando contra la envidia en el ministerio pastoral
Cuando amamos a la iglesia, buscamos hacerle bien mientras anhelamos que otros hagan más bien de lo que nosotros podríamos hacer.
Cuando amamos a la iglesia, buscamos hacerle bien mientras anhelamos que otros hagan más bien de lo que nosotros podríamos hacer.
Quienes admiran y adoran a Cristo no solo reverenciarán Su persona, sino también Su perspectiva. Querrán saber y recordar qué piensa Jesús de Su Iglesia.
Un poema inspirado en el Salmo 133:1: «Miren cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos habiten juntos en armonía».
En este mundo individualista, es crucial que los pastores sirvamos a nuestras iglesias ayudándoles a entender qué es lo que nos une como creyente.
El mundo con frecuencia presenta al cristianismo bajo un lente negativo. En realidad, la iglesia está haciendo mayor bien del que podemos imaginar.