¡Únete a nosotros en la misión de servir a la Iglesia hispana! Haz una donación hoy.

×

Recientemente, en la conferencia de Together for the Gospel en Louisville, EUA, tuve el gozo y privilegio de acompañar a más de 12,000 participantes mientras adoraban a Dios cantando.

La imagen y el sonido de adorar a Dios juntos, con más de 10,000 creyentes, es abrumadora. Pero podemos experimentar algo parecido con una audiencia más pequeña. Muchas veces nos afecta profundamente la alabanza en una conferencia, retiro, o evento de adoración. Tanto así que al congregarte con tu iglesia el domingo se siente como una gran decepción.

¿Por qué la experiencia al adorar cantando en un evento no se traslada al domingo en la mañana? ¿Deberíamos esperar eso? ¿Pueden aprender las iglesias locales de los eventos de adoración? ¿Ocurre la mejor adoración musical fuera del domingo por la mañana?

En otras palabras, ¿necesita la adoración a la iglesia? Pude discutir esta y otras preguntas con algunos amigos —Keith Getty, H. B. Charles, Jr., Matt Boswell, y Matt Westerholm— en un taller de T4G. Quería explorar la relación entre cantar en un evento junto a mucha gente que no conoces y cantar con tu iglesia el domingo por la mañana.

He listado muchos de los puntos que cubrimos (y algunos que no llegamos a cubrir) abajo. Algunos de ellos están dirigidos a líderes, otros a aquellos que asisten.

Beneficios de los “eventos de adoración”

1. Nuevas canciones. Los eventos pueden presentarnos canciones que no hemos escuchado, y nos hacen saber lo que es cantarlas con un grupo.

2. Inspiración. Ver a músicos hábiles y bien ensayados puede motivarnos a hacer lo que hacemos en la iglesia, pero mejor.

3. Evaluación. Ver a otros puede servir como un estándar para evaluar algunas de nuestras propias prácticas.

4. Anticipación. Podemos experimentar un adelanto de lo que será adorar a Dios con gente de toda tribu y nación en los nuevos cielos y la nueva tierra.

5. Evangelismo. Algunos inconversos que no se asomarían a la puerta de una iglesia podrían aparecer en un evento.

6. Encuentro. Los eventos son una ocasión más para que el Espíritu de Dios obre en los corazones de su pueblo.

7. Exposición. Podemos movernos más allá de nuestro estrecho pensamiento que nuestra iglesia o denominación es la única que busca glorificar a Dios.

Pero con todo lo que hay para recomendarlos, los tiempos de alabanza musical fuera de la iglesia local pueden tener algunas desventajas.

Debilidades de los “eventos de adoración”

1. Liturgia. Las consideraciones pragmáticas a menudo impulsan las “liturgias” de las conferencias y eventos, más que preocupaciones pastorales o bíblicas. No es sabio y a veces es dañino cuando las iglesias toman las formas de estos eventos para el domingo por la mañana.

2. Brevedad. Un evento de una tarde o un fin de semana, aunque es impactante, nunca podrá reemplazar el ministerio continuo, semana tras semana, de vida a vida que sucede con el tiempo en el contexto de una iglesia local.

3. Personalidad. La gente puede ir a los eventos principalmente para ver a una banda o artista, y esto contribuye a una cultura que está más basada en gustos que en fidelidad.

4. Fama. Para aquellos que lideran existe una tensión inherente entre la autopromoción o el beneficio propio y servir a otros para la gloria de Cristo. Los jóvenes músicos fervientes pueden asumir que tocar para una multitud es un mejor uso de sus dones que tocar para sus iglesias.

5. Irrealidad. En eventos podemos experimentar altas emociones por diversas razones que nos llevan a pensar que los domingos deberían tener el mismo efecto.

6. Descuido. Los promotores, agentes, ejecutivos de marca, y otras personas pueden tener más poder de decisión sobre las canciones que se cantan, que el pastor.

7. Escritura. Los eventos no están necesariamente dirigidos o conectados por la Palabra de Dios, la cual es la razón principal por la que Dios se relaciona con nosotros cuando nos congregamos (Éx. 20; 34:6-7; Dt. 27:1-8; 2 C. 31:2-4; Sal. 119; Mt. 15:3-9; Hch. 13:48-49; 1 Ti. 4:13).

Así que, ¿existen beneficios únicos al cantar con la iglesia reunida el domingo por la mañana? Por supuesto.

Ventajas de cantar junto con tu iglesia local

1. Formación. La adoración congregacional es formativa. Con el tiempo puedes moldear la imagen que la gente tiene de Dios, de ellos mismos, y del mundo a través de una liturgia intencional. Sumado a ello, Dios construye iglesias locales unidas para que pueda habitar en ellas por su Espíritu (Ef. 2:22).

2. Entrenamiento. Las iglesias locales proveen la oportunidad para discipular músicos más jóvenes en habilidades y actitudes.

3. Ejemplo. La gente puede ver a los líderes fuera del domingo por la mañana, y los líderes pueden cultivar la adoración como una vida, no solo como una canción (Ro. 12:1-2; He. 13:15-16).

4. Compromiso. Con el tiempo puedes hacer que la gente que difícilmente participa tenga una interacción significativa con letras basadas en el evangelio y la instrucción bíblica.

5. Pastoreo. Puedes dirigir a la gente pastoralmente semana a semana, mes a mes, y año a año, porque en verdad sabes lo que está pasando en sus vidas.

6. Santificación. Prepararse y planear semanalmente tiene un efecto santificador en nosotros. Nos fuerza a orar, a pensar en nuestras vidas, y a considerar nuestros caminos.

7. Comunidad. La iglesia local nos hace posible conocer a otros y ser conocidos por ellos. Ello cultiva una humildad que viene de ver la obra de Dios a través vasijas de barro (2 Co. 4:7).

No dejando de congregarnos

No hay duda de que cantar en adoración otro día a parte del domingo por la mañana es beneficioso. El pueblo de Dios cantando reunido en cualquier contexto ha sido una señal de avivamientos a través de la historia y puede fortalecer nuestra fe de varias maneras.

Adorar a Dios cantando en diferentes eventos nunca tiene el propósito de reemplazar el cantar con tu congregación domingo tras domingo.

Pero adorar a Dios cantando en diferentes eventos nunca tiene el propósito de reemplazar el cantar con tu congregación domingo tras domingo. Eso mantiene un gozo diferente, y es una oportunidad. Mientras se desarrollaba el taller de T4G, eso se hizo evidente. Vimos que esa adoración apasionada al cantar juntos es algo que Dios primordialmente busca que hagamos no solo en eventos o conferencias, sino con nuestras iglesias locales.

Si juegas un rol en planear o dirigir esas reuniones, oro para que Dios te de una fe renovada para hacer lo que Él te llamó a hacer, y para saber cómo hacerlo.

Y si eres parte de una iglesia que es liderada por otros, ¡no te olvides de agradecer a tus líderes por todos los sacrificios que hacen para servirte!


Publicado originalmente en Worship Matters. Traducido por Harold Bayona.
Imagen: Lightstock.
Recibe cada día los artículos, podcasts, y vídeos más recientes.
CARGAR MÁS
Cargando