En “Lo que estoy leyendo…” conocemos un poco más sobre los hábitos de lectura y libros favoritos de miembros del Consejo Pastoral de Coalición por el Evangelio y otros colaboradores.
En esta ocasión, conversamos con Ana Ávila, autora del libro Aprovecha bien el tiempo.
¿Qué estás leyendo ahora mismo (dentro y fuera de la Biblia)?
En la Biblia, mi esposo y yo estamos leyendo Eclesiastés. Decidimos leer un solo libro bíblico por mes, a nuestro propio ritmo, para tener oportunidad de profundizar en la Palabra sin la presión de seguir un plan específico de lectura. En enero empezamos con Salmos. Después de Eclesiastés seguiremos con Marcos y concluiremos el año en Malaquías.
Fuera de la Biblia estoy leyendo varios libros: con algunos tengo meses y otros son adiciones más recientes. Entre las lecturas se encuentran La iglesia, ¿por qué es importante?; 168 horas; y Amplitud. Finalmente, también estoy leyendo mi propio libro —Aprovecha bien el tiempo— porque tenemos un grupo de lectura en el que estudiamos juntos el material.
¿Qué libros esperas leer próximamente?
Espero leer pronto El método Zettelkasten, un libro que enseña cómo tomar notas de manera eficaz; Pecados respetables, en el que Jerry Bridges confronta aquellos pecados que solemos tolerar; y también quiero releer Cinco puntos, un libro donde John Piper explica las doctrinas de la gracia.
Con todos los libros que existen, ¿cómo decides leer?
Usualmente leo a personas que admiro —pensadores, pastores, maestros, teólogos, científicos, y más— y a las personas que admiran las personas que admiro. Cuando un libro captura mi atención por el tema que expone o porque alguien de confianza lo recomienda, lo agrego a mi lista de libros por leer en Goodreads.
Cuando acabo una lectura, elijo otro libro de mi lista, dependiendo del tema en el que esté deseando profundizar en ese momento.
¿Qué libros o autores han sido más influyentes en su ministerio?
John Piper, Tim Keller, C. S. Lewis, y Cal Newport.
¿Qué consejo le daría a alguien que quiere leer, pero se le dificulta concentrarse?
Debes dejar de acostumbrar a tu cerebro al placer inmediato y efímero de los medios digitales. Disfrutar un libro requiere tiempo y esfuerzo, pero nuestras mentes están mucho más acostumbradas a la satisfacción instantánea de leer una publicación en redes sociales y al entretenimiento pasivo de videos de YouTube.
Si nuestro consumo de información diario es superficial, que no nos sorprenda ser incapaces de digerir los argumentos profundos de un buen libro. Empecemos a limitar nuestro uso de redes sociales, y entrenemos nuestra mente para poco a poco ser capaz de concentrarnos en las páginas de un libro. Empecemos con quince minutos completamente libres de distracciones. Suena simple, para la mayoría de nosotros es un reto.
