Del 4 al 6 de enero de 2017, Nueva York será la sede de la conferencia “En esto me sostengo”, en celebración por los 500 años de la Reforma Protestante. Tuve la oportunidad de entrevistar a José Olivares, pastor de la iglesia Seguidores de Jesús, que organiza este evento. Sugel Michelén, pastor de la IBSJ y miembro del Consejo de Coalición por el Evangelio, será el conferencista invitado.
1. Por favor, coméntenos un poco acerca de usted, ¿quién es y cómo sirve a la Iglesia?
Soy José Olivares. Dios me concedió, con un grupo de hermanos, el privilegio de plantar la iglesia Seguidores de Jesús hace ya once años en Long Island, NY, en la que desde entonces soy pastor. Desde su fundación, nuestra iglesia ha procurado la sana enseñanza del evangelio, con énfasis en la manera en que transforma nuestras vidas. Hoy por hoy, Seguidores de Jesús ha plantado múltiples congregaciones con base en el trabajo del Colegio Reformado de Teología, institución establecida por nuestra iglesia, que brinda capacitación en el conocimiento de las Escrituras, y el servicio al Señor y a su cuerpo.
2. Háblenos brevemente sobre el estado de la iglesia hispana en Nueva York.
Nueva York es un estado multicultural, y eso se refleja en nuestras iglesias en el área, compuestas por hermanos de diversas naciones de Latinoamérica. Sin embargo, estamos convencidos de que no debemos enfocar nuestro trabajo en nuestros rasgos culturales, sino en las verdades universales y eternas del evangelio. La Palabra de Dios rompe cualquier esquema cultural, y nos conduce a abrazar a Cristo como única verdad esencial. En Nueva York, como en el mundo, es urgente la expansión del conocimiento bíblico acerca de quién es Dios, quién es Cristo, y quién es el Espíritu Santo.
3. ¿Por qué hablar de la Reforma Protestante y no de lo que está ocurriendo ahora?
Hablar de la Reforma es volver a las sendas antiguas, a la verdad no adulterada, al único y auténtico mensaje de salvación, el cual es poderoso y eficaz en todo momento de la historia. La suficiencia de Cristo, la soberanía de Dios, y las ricas verdades que durante miles de años fueron el baluarte de muchos hermanos nuestros que lucharon contra el engaño de la falsa religión, son temas que deben ser recordados y apreciados. Es de vital importancia volver a la suficiencia del evangelio, o como alguien lo ha dicho, “rescatar al evangelio de manos de los evangélicos”.
4. ¿Por qué una clase para estudiantes sobre la soberanía de Dios y la responsabilidad del hombre?
La tensión entre la soberanía de Dios y la responsabilidad humana ha dado lugar a que, cuando se estudian las doctrinas de la gracia, un tema tiende a predominar mientras que el otro se ve debilitado. Es urgente recalcar la relevancia de ambos conceptos, de modo que los creyentes no se desanimen al grado de descuidar la santificación de sus vidas, la predicación a los perdidos, la obra misionera, ni la confianza en la obra divina de regeneración. El equilibrio en este tema es un fruto deseable y necesario en los creyentes de hoy.
5. ¿Qué espera que los asistentes se lleven de esta conferencia? ¿Cuál es el fruto que esperan ver?
Esperamos en que Dios traiga un despertar a nuestros corazones y afirme nuestra fe en la esencia inmutable del evangelio. Que el Señor nos conceda apreciar más y mejor el inmenso valor de la predicación, exposición, y proclamación de este mensaje. Y que nos adiestre eficazmente para amar a nuestra comunidad de creyentes e inconversos por medio del santo evangelio y del testimonio sobre cómo éste ha transformado nuestras vidas.
Todos están invitados, y serán muy bien recibidos en nuestras tres ubicaciones en Nueva York: Long Island, el Bronx, y Queens. No les invitamos a conocer la Gran Manzana; les invitamos a conocer el evangelio, que es el Poder de Dios para salvación a todo aquel que cree. Les esperamos.
